martes, 22 de noviembre de 2011

Embarazo y desarrollo prenatal



Análisis y Observación 


ABEL DORRIS y el Sindrome del Alcoholismo fetal


El síndrome del alcoholismo fetal (SAF), un conjunto de anormalidades que presentan los hijos de madres que beben durante el embarazo es una de las causas del retraso mental. Pero en 1971, cuando el escritor Michael Dorris adoptó a un niño sioux de 3 años de edad, culla madre era una empecinada consumidora de alcohol, los hechos sobre el SAF no tenían una amplia divulgación ni se habían investigado mucho científicamente, aun cuando el síndrome se había observado durante siglos. No fue si no hasta 11 años despúes, como lo relata Dorris en The Broken Cord (1989), que descubrió el origen del problema de desarrollo de su hijo adoptivo.
El niño llamado Abel, nació casi 7 semanas antes de tiempo, con bajo peso, y había sufrido de abuso y desnutrición antes de ser llevado a un hogar sustituto. Su madre había muerto de envenenamiento alcohólico a los 35 años de edad. A su padre lo golpiarón hasta matarlo en un callejón, después de un gran número de arrestos. El niño era bajo de estatura para su edad, no tenía control de los esfínteres y sólo podía decir como 20 palabras. Apesar de que le habían diagnosticado un retraso mental leve, Dorris tenía la seguridad de que en un ambiente positivo el niño podría mejorar y llegar a un nivel normal.
Abel no mejoró. Cuando cumplió 4 años todavía usaba pañales y pesaba tan sólo 12 kilos con 150 gr. Tenía problemas para recordar nombres y compañeros de juegos. Su nivel de actividad era demasiado elevado, la circunferencia de su cráneo era demasiado pequeño y padecía ataques convulsivos graves e inexplicables.
Conforme pasarón los meses, Abel tuvó problemas para aprender a contar, a identificar los colores primarios y para atarse las agujetas. Antes de entrar a la escuela fue etiquetado con "problemas de aprendizaje". Su coeficiente intelectual era, y así permaneció de 65. Gracias a los esfuerzos de una dedicada maestra de primer grado, Abel aprendió a leer y a escribir; pero su nivel de comprensión era bajo. Cuando terminó la escuela primaria, en 1983, "aún no era capaz de sumar, restar, contar dinero o identificar de forma consistente la ciudad, el estado, el país o el planeta en el que vivía" (Dorris, 1989, pp. 127-128).
Para entonces, Michael Dorris ya había descubierto lo que andaba mal con su hijo. Como profesor asociado de los estudios Native American en el Datmouth College, estaba familiarizado con las presiones culturales que elevan la prevalencia del alcoholismo entre los indígenas de Estados Unidos. En 1982, un año antes de la graduación de Abel, Michael visitó un centro de tratamiento para adolescentes con farmacodependencia en una reservación siux de Dakota del Sur. Allí se sorprendió al ver a 3 muchachos que "podrian haber sido hermanos gemelos (de Abel)" (Dorris, 1989, p. 137). No sólo se parecían a Abel, si no que actuaban como él.
El Síndrome de Alcoholismo Fetal se identificó durante los años 70, mientras Abel crecía. Una vez que el alcohol penetra en la sangre del feto, permanece ahí en altas concentraciones durante largos periodos y daña al cerebro y otros órganos vitales. No existe una cura. Como escribió un médico experto, "para el feto la resaca puede durar toda la vida" (Enloe, 1980, p. 15).
Para la familia, los efectos del SAF también pueden ser devastadores. Los años de intentos constantes por llevar a Abel a la normalidad y después aceptar los daños irreversibles hechos en el útero, bien puede haber sido un factor en los problemas posteriores del matrimonio de Michael Dorris con la escritora Louise Erdrich, el cual terminó en un divorcio y el suicidio de él ocurrido en 1997, a los 52 años. Según Erdrich, Dorris padecía una profunda depresión, posiblemente exacerbada por las dificultades que enfrento como padre (L. Erdrich, comunicación personal, lo. de marzo de 2000).
A los 20 años de edad, Abel Dorris había entrado a un programa de entrenamiento vocacional y se había mudado a un hogar supervisado, a donde se había llevado su colección de animales de peluche, muñecos de papel, historietas de periódicos, fotografías familiares y sus viejas tarjetas de cumpleaños. A los 23 años, 5 años antes de la muerte de su padre, fue atropellado y muerto por una automóvil (Lyman, 1997).

Psicología del Desarrollo de la Infancia a la Adolescencia.
Novena Edición, año 2005.
Diane E. Papalia, Sally Wendkos olds, Ruth Duskin Feldman.

13 comentarios:

  1. Para los estudiosos del desarrollo infantil, la historia de Abel Dorris es un recordatorio devastador de la responsabilidad que tienen los padres biológicos en el desarrollo crucial que se lleva a cabo antes del nacimiento. El útero es el primer ambiente del desarrollo del niño y la trascendencia que tiene para éste es enorme. Además de lo que la madre ase y de lo que le sucede a ella, existen otras influencias ambientales, desde las que afectan al esperma del padre hasta el entorno tecnológico, social y cultural, los cuales pueden afectar los cuidados prenatales que recibe la madre.
    Cuando los padres deciden agrandar la familia y traer a la vida a un nuevo ser, muchas veces no toman en consideración sus actos anteriores e incluso aquellos actos que llevan a cabo durante el periodo del embarazo, por lo cual, tampoco dimensionan todos los problemas que le pueden causar a ese nuevo ser durante todo el desarrollo de su vida, ya que, el fumar, beber, drogarse, pasar malos ratos, golpearse, entre otros son hechos que pueden causar un daño irreparable en el desarrollo del niño desde que llega a la vida hasta que deja este mundo.
    Cuando uno sabe que es portadora de un nuevo ser es fundamental que dimensione todos los cambios que esto va a ocasionar desde ese momento en adelante, en la vida de ambos, debido a que ya no se está sola(o) y hay un nuevo ser que depende de nosotros, el cual no pidió venir a este mundo, y si llega a él , es muy importante que al menos, dentro de su familia, y en su vida cotidiana pueda contar con una vida relativamente cómoda y aceptable, no es justo que cargue con las irresponsabilidades de sus padres si ni siquiera es capaz de mantenerse en pie por sí solo, necesita que lo cuiden y que lo protejan y no venir hacerse cargo de 2 personas adultas que no son capaces de mantenerse por ellos mismos. Piénsalo…. No es justo, a ti no te gustaría que te hubiese ocurrido...

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    1. Me encanto la lectura excelente aporte para el lector para que no vivíamos ciegos de la realidad y aprendamos un poco más de cómo en el caso de nosotras las madres aprendamos a cuidar nuestros embrazon sin descartar que también la dé los padres cuenta

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    2. Esta lectura es muy importante por que nos orienta a que tener hijos es una responsabilidad y que muchas veces nos hacemo una autoevaluacion y muchos menos conocemos bien al pedre.

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  2. Es muy interesante e importante porqué nos enseña que debemos crear un ambiente sano cuando vamos a tener un bebé,saber como alimentarnos y saber que hay una nueva vida dentro de nosotras,quien es el que sufre las consecuencias, de un mal habito que tomemos
    Melissa Sanchez

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  3. una historia interesante por los estudios pero por otro lado muy triste!

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  4. Muy buenos la lectura, tenemos que ser conscientes cuando estamos embarazadas porque solo esa vida que llevamos dentro sufre la consecuencia.

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  5. Saludo!!
    Muy buen lectura y es inevitable no sentir empatía al momento de leerla, esto nos deja claro que ser madre es un compromiso tanto de la madre como del padre ya que los dos influye en que el desarrollo del niño sea el adecuado, debemos ser responsables al Memento de traer una criatura al mundo, es lamentable todos los que tuvo que pasar Abel dorris por la falta de responsabilidad de sus padre.

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    1. Muy buena lectura ser madre va más allá de una simple palabra esto implica mucho compromiso.

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  6. Excelente!!, Aporte para los que estamos estudiando Psicología.
    Los padres con problemas de adicción, traen al mundo niños enfermos.

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  7. Exelente aportes para los padres ,a cuidar nuestro cuerpo y de la persona que lleva dentro

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  8. Me gustó mucho, exelente nosotras como madre debemos de pensar que tenemos que tener una buena alimentación,y cuidar de nosotras,en esa etapa tan hermosa

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  9. Waoo! Eso demuestra como una persona puede ser afectada por tan solo las malas decisiones de otras, como un niño puede perder su desarrollo y aprendizaje por irresponsabilidades de personas que debieron tener el objetivo de cuidar de ellos y su bienestar más no dañar su periodo de crecimiento, desarrollo y aprendizaje.

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  10. Excelente intervención. Corregir en el inicio de la redacción hay unas faltas de ortografía, no culla, se escribe con y, cuya. No se dice golpiaron , se dice golpearon.

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